Te encuentro
allá donde la vista no puede alcanzarte
en el infinito espacio en el que descubro cuan pequeña soy
y cuan grande eres
en el abrazo soñado que confundió mi alma con la del ser amado
en la sonrisa del hombre niño que no ha perdido la alegría, ni la fe, para creer, a pesar de…
Te encuentro
en el amor que se entrego sintiendo que falto mucho más, más vida para dar
que sintió que nunca fue demasiado pues no alcanzo esa medida para la cual siempre seremos escasos
amor inmensurable, bondad infinita como el espacio,
incomprensible para el ser humano…
Te encuentro
en la transparencia, sencillez que desnuda todas las cosas,
que desarma todo artilugio y lo deja sin sentido sin ti
que deja al descubierto el palpito de la vida:
la verdad, el amor, solamente el amor…
Y te busco
porque estas en cada parte que respira
porque llenas a raudales con tu amor cada espacio del alma que te busco…
Amor
que por grande es difícil de contener
se desborda en múltiples formas difíciles de comprender
quien entiende al que se puso detrás para sostener
al que se dejo desplazar por un bien mayor
al que sufrió, al que creyó sin ver, al que esperó, al que soportó…
al que murió por todos…
quien entiende al que fue a lo profundo a lo despreciado para que no fuéramos nosotros
quien puede en este mundo entender este amor
amor que cuando se bebe es dolor
quien puede beberlo sin sentir dolerse el corazón
sin sentirse abrumado…
Y es un abrazo que es cobijo ante la sonrisa humilde y soberana del que todo lo pudo, del que todo lo puede, del que llena el espacio que al corazón le faltaba…
Y es querer recrear aquí… un poco más de ti…
Amor que se desborda en aquellos que no han perdido la alegría, ni la fe, para creer, como el niño, a pesar de…
Flori *)